premioseguro.com.

premioseguro.com.

Cobertura de daños a terceros: ¿Qué necesitas saber antes de contratar?

Tu banner alternativo

Introducción

En la actualidad, contratar un seguro de auto es algo imprescindible para cualquier conductor. Y es que en la carretera pueden ocurrir imprevistos que pueden acabar convirtiéndose en un verdadero quebradero de cabeza. Uno de los aspectos más importantes que debemos tener en cuenta al contratar un seguro de auto es la cobertura de daños a terceros. En este artículo te contamos todo lo que necesitas saber antes de contratar una póliza con este tipo de cobertura.

¿Qué es la cobertura de daños a terceros?

En términos generales, la cobertura de daños a terceros es aquella que protege al conductor en caso de que cause algún tipo de daño a otra persona o a su propiedad. Para entenderlo mejor, imaginemos que conduces tu auto por una carretera y, desafortunadamente, sufres un accidente en el que chocas contra otro coche. La cobertura de daños a terceros te protege en caso de que ese otro coche sufra daños materiales o si los ocupantes del vehículo resultan heridos.

¿Qué incluye la cobertura de daños a terceros?

Es importante entender que la cobertura de daños a terceros no abarca todo tipo de contingencias que puedan ocurrir en la carretera. Normalmente, este tipo de coberturas incluyen diferentes aspectos, como son:
  • Daños materiales a terceros: En caso de que el conductor cause algún tipo de daño a un vehículo o propiedad ajena, la compañía de seguros se hará cargo de la reparación o sustitución del coche o propiedad dañada.
  • Lesiones a terceros: En caso de que el conductor cause algún tipo de lesión a otra persona, la compañía de seguros se hará cargo de los gastos médicos necesarios para tratar las heridas.
  • Gastos jurídicos: En caso de que se deba acudir a los tribunales, la compañía de seguros asumirá los gastos necesarios para llevar a cabo la defensa del conductor.

¿Qué no incluye la cobertura de daños a terceros?

Por otro lado, también es importante mencionar que la cobertura de daños a terceros no incluye todas las contingencias que pueden ocurrir en la carretera. Algunas de las exclusiones más comunes son:
  • Daños al propio vehículo: En caso de que el conductor sufra algún tipo de daño en su propio coche, este no estará cubierto por la cobertura de daños a terceros.
  • Robo del vehículo: En caso de que el coche sea robado, la cobertura de daños a terceros no ofrece protección.
  • Daños a bienes propios: En caso de que el conductor cause algún tipo de daño a su propia propiedad, esto tampoco estará cubierto por la cobertura de daños a terceros.

¿Por qué es importante contratar una cobertura de daños a terceros?

A estas alturas, quizás te estés preguntando si realmente es necesario contratar una cobertura de daños a terceros. La respuesta es un rotundo sí. Y es que, aunque te consideres un conductor responsable, nunca se sabe lo que puede pasar en la carretera. Con una cobertura de este tipo, estarás protegido en caso de causar daños a terceros y te evitarás tener que hacer frente a grandes gastos que pueden surgir en caso de accidente. Además, tener una buena cobertura de seguros también te dará la tranquilidad que necesitas a la hora de conducir.

Conclusión

En definitiva, la cobertura de daños a terceros es una parte indispensable de cualquier póliza de seguros de auto. La mayoría de los conductores optan por contratar esta cobertura para protegerse en caso de imprevistos en la carretera. Es importante leer bien los términos y condiciones de la póliza antes de contratarla y asegurarse de que se está contratando la cobertura adecuada para las necesidades de cada conductor.